«Cansada de estudiar para la selectividad, Fanny mata el tiempo en las redes sociales y decide presentarse a un misterioso concurso de supervivencia.
Para su sorpresa, es seleccionada junto a otros nueve adolescentes. Les cubren los ojos y los hacen subir a un furgón en el que les explican el objetivo del juego: tienen que permanecer dentro de un bosque maldito hasta que solo quede uno de ellos.
Todos los medios legales son válidos para conseguir que los otros concursantes abandonen. Cae la noche y Fanny está sola en medio de ninguna parte. A su alrededor, la oscuridad y los ruidos del bosque son cada vez más inquietantes. Empieza a llover. El juego puede empezar.»
¡Hola bonicas! Hace dos años leí por primera vez al autor con su novela ‘En la casa’. Una novela juvenil de terror que me llamó mucho la atención y que me dejó con un muy buen sabor de boca. Por ello cuando DNX España anunció que iba a publicar la nueva novela del autor, tuve claro que me apetecía darle una oportunidad para volver a sumergirme en sus páginas llenas de suspense.
Diez adolescentes adictos a las redes sociales, son seleccionados para participar en un concurso de supervivencia en vivo. Ninguno sabe lo que le espera pero todos están dispuestos a ser los últimos en abandonar con tal de obtener el ansiado premio. Al principio todo parece fácil pero cuando empiezan a suceder fenómenos extraños, comprenden que no se trata de un juego.
En cuanto comencé la novela tuve la sensación de que iba a ser un libro que me iba a enganchar ya que la dinámica literaria me recordó mucho a su predecesor: thriller juvenil cargado de suspense.
La novela cuenta con una trama interesante y original que tiene los ingredientes necesarios para enganchar. Un grupo de adolescentes abandonados a su suerte en mitad de un bosque, dispuestos a pasar miedo con tal de ganar el concurso en que están inmersos. Hay suspense desde el primer momento ya que vamos descubriendo lo que está ocurriendo de la mano de los diferentes personajes.
La idea es buena y las tramas que se van desarrollando conforme avanza la novela podían dar mucho peso a la historia, el problema es que a veces sentía que el autor las había creado por arte de magia. No se desarrollaban con la suficiente coherencia para que formasen un todo. Aunque respondían a un hilo conductor en el que se fundamentaba la novela, muchas veces se desdibujaba esa conexión, resultando casual y poco creíble. Esto sumado a aspectos como los comportamientos infantiles de los protagonistas, hacían que mi interés decayese por momentos.
El motivo por el cual se desarrolla el concurso y como se lleva a cabo (no digo más, porque sería un gran spoiler) me gustó pero una vez más, sentí que no se trataba de la mejor manera posible. El mensaje que hay tras ese giro argumental, es muy positivo y creo que invita a reflexionar. Eso es innegable y ojalá se hablase más sobre temas como el bullying, el ciber acoso, la influencia de las redes sociales en los adolescentes etc., pero en mi opinión el final hace que se desdibuje dicho discurso. Una pena porque estaba bien construido y daba sentido a la trama.
Si tuviese que quedarme con algo, sería la narración. El autor sabe cómo jugar con el lector a través de las bromas que se van gastando los personajes, aderezando cada escena con un toque paranormal que hace que estés en alerta en todo momento por lo que pueda suceder. Eso junto a sus cortos capítulos y a los constantes cambio de narrador, hacen que la novela se lea sin apenas darte cuenta.
