GAZANIA - Sofía Parra

«Hay menos de cien pasos desde la casa de Gazania hasta su colegio. Es un camino que conoce bien, pero el día que su padre no la acompaña y lo recorre sola, desaparece.

Aunque el pueblo entero se vuelca en su búsqueda, el tiempo se agota y la personalidad de la niña pronto se verá anulada por los deseos de su captor.

¿Cuánto podrá aguantar antes de convertirse en Rui… para siempre?»

¡Hola bonicas! Como ya os conté mi intención es usar el blog únicamente para las reseñas pertenecientes a colaboraciones y la que os traigo hoy me hace especial ilusión ya que es la primera colaboración que hago con Roomie ediciones. En navidades me comunicaron que iba a ser una de las nuevas colaboradoras de la editorial y no podía tener más ganas de contároslo ya que su catálogo (link aquí)me parece una delicia. Cuando tuve que elegir con que libros comenzar esta nueva aventura literaria tuve claro que Gazania tenía que ser el primero ya que llevaba tiempo llamándome la atención. 

Gazania es una niña que está acostumbrada a la sobreprotectora vigilancia de su padre, por eso cuando el profesor de la clase propone que los alumnos acudan solos hasta el colegio, ella acepta la idea llena de ilusión. Viven en un pueblo muy pequeño donde todos se conocen y nada puede ocurrir. O si, ya que en uno de esos días, Gazania desaparece sin dejar rastro.

Últimamente no suelo leer mucho suspense pero la premisa de la historia me parecía muy interesante. Una niña que desaparece, un pueblo que se vuelca en su búsqueda, una familia que no sabe qué hacer por encontrarla y un secuestrador que debe cuidar cada paso en falso para no ser descubierto. La idea principal incita a pensar que vas a encontrarte con una historia oscura y truculenta, pero os aseguro que lo que encontré en esta novela fue algo totalmente diferente.

No necesitas más que leer un par de páginas para darte cuenta de que va a ser una lectura dura y compleja. Desde el primer momento tuve claro que iba a sentir y a enfadarme, pero que a su vez no querría soltar el libro, y eso fue precisamente lo que me ocurrió ya que la novela me atrapó desde el principio. Engancha e intriga a partes iguales, haciendo que sus 300 páginas duren un par de tardes como mucho.

Lo que más me gustó de la trama fue su estructura ya que se encuentra dividida en tres bloques diferenciados que marcan la evolución de Gazania y Rui. Todo en la historia tiene coherencia pese a ir cambiando de punto de vista.

Pero si la trama merece la pena, lo que me atrapó fue su cuidada narración. La forma que tiene Sofía de contar el cautiverio de Gazania, su pérdida paulatina de identidad, sus sentimientos, el miedo creciente., es sumamente delicado. Esta novela es dura, cruda y terrible por los temas de los que habla, pero la autora lo cuenta todo con una elegancia digna de elogiar. En todo momento sabes que es lo que está ocurriendo entre esas cuatro paredes pero la autora no necesita plasmarlo en palabras para que seas capaz de entenderlo. No lo necesita, porque sabe tocarte el corazón, logrando que empatices con cada personaje, con cada pequeño sentimiento, con cada temor.

Como educadora social valoro muchísimo el trabajo de documentación que hay tras esta novela porque realmente se puede tocar el respeto con el que la autora ha tratado cada pequeño detalle, construyendo una novela muy necesaria que da voz a la realidad de miles de niños que sufren su mismo destino y que en muchas ocasiones terminan en el olvido de una sociedad egoísta e insensible.

Si tuviese que ponerle un pero sería que en ocasiones la madurez de la niña me sacaba de la historia porque no la lograba imaginar en su cuerpo. En la historia se insiste en que es muy responsable para su edad, pero a veces no me resultaba del todo verosímil.

Gazania es una novela que engancha gracias al suspense que hace que seas incapaz de soltar la historia hasta acabarla. A pesar de la dureza de los temas que trata, la delicada narración hace que merezca la pena sufrir junto a sus personajes.